Vampiros, hombres lobo, zombis, políticos, dictadores exhumados.... Halloween se llena estos días de seres misteriosos y aterradores que ocupan las calles, los medios de comunicación y las pantallas de cine y televisión. Uno de estos seres míticos en las películas de terror son las momias, no las momias que llevan 40 años enterradas y salen ahora de su tumba para seguir dando por culo una vez ya muertas, me refiero a las momias estas de las vendas cochambrosas y los andares indecisos y tambaleantes. La figura de la momia ha sido un recurso muy utilizado en el mundo del cine y la literatura de terror.
A pesar de que "la momia" más famosa del cine es la protagonizada por Boris Karloff en 1932, no es la primera obra que presenta a este personaje. La primera película sobre el bicho con vendas es francesa y se remonta a 1909, se llamaba La momia del rey Ramsés. En 1911 aparecieron tres más, todas tituladas La momia (una francesa, una inglesa y una americana). De Alemania llegó Los ojos de la momia (1918) y El amor de la momia (1926)...bastante cutres parece ser.
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| Boris Karloff, personificando a La Momia, 1932 |
En la primera película de la saga, el legionario Rick O'Connell y un compañero descubren las ruinas de Hamunaptra, la ciudad de los muertos. Algún tiempo después vuelven al mismo lugar con una egiptóloga y su hermano. Allí coinciden con un grupo de estadounidenses, deseosos de correr aventuras, que acabarán provocando la resurrección de la momia de un diabólico sacerdote egipcio que intenta desesperadamente recuperar a su amada.
Dejando atrás los mitos del cine, el concepto de momia y de momificación es mucho más complejo de lo que un puñado de vendajes mal colocados nos pueden hacer pensar. Como cada Halloween desde hace ya tres años, mi redactora de terror biológico @luciasezrami nos trae una explicación científica de este proceso. Tras hablarnos de parásitos que zombifican otros organismos y ponernos el cuerpo malo con la ameba comecerebros, este año se atreve a hablarnos de momias.... (y este año es mayor mi ilusión pues ya no hay notas o positivos de por medio, lo hace por que le apetece....y bueno, por las chuches y la amenaza de que si me falla después de comprometerse, le compro los polvorones a Salvador en vez de a ella)
DESTRIPANDO EL MITO DE LA MOMIFICACIÓN. MÁS NATURAL DE LO QUE PARECE.
Cuando nos hablan de momias lo primero que se nos viene a la cabeza es la típica de las películas animadas, pero en la realidad no tienen nada que ver con eso. De hecho, la propia naturaleza es capaz de formar una momia sin necesidad de ninguna intervención humana, únicamente se necesitan unas condiciones especiales que impidan la putrefacción de los tejidos del cadaver.
Empecemos por lo
primero, la momificación es un proceso por el cual los tejidos blandos del cuerpo se conservan aún
después de la muerte... pero, ¿qué le pasa
exactamente a nuestro cuerpo cuando morimos? .... y no, no nos vamos al cielo¡¡¡
Cuando nuestro corazón deja de latir, las células se quedan sin oxígeno y nuestro sistema inmune deja de funcionar por lo que las bacterias que viven en nuestro organismo no se encuentran defensas y empiezan a campar a sus anchas por nuestros órganos.Se inicia un proceso de descomposición del cuerpo que hace que finalmente sólo queden los huesos. Sin embargo, y con más frecuencia de lo que nos imaginamos, en algunas ocasiones se produce lo que se conoce como momificación natural o espontánea. |
| Resto momificado |
La momificación es un proceso que se da en ambientes especialmente secos y que se produce con más frecuencia en los cuerpos de niños y de adultos especialmente delgados. Consiste en la desecación del cadáver por evaporación del agua de sus tejidos, lo que hace imposible el desarrollo de los microorganismos, deteniendo así proceso de la putrefacción. El resultado es que la forma exterior del cuerpo se conserva bastante bien, hasta el punto de poder reconocerse las facciones del difunto.
MOMIAS A TRAVÉS DE LAS DISTINTAS CIVILIZACIONES
La palabra ‘momia’ es originaria de Persia y deriva de la palabra ‘mummeia’ o ‘mum’, que significa asfalto o piche, sustancia empleada para tratar los cuerpos. Con el transcurso del tiempo la palabra momia pasó a designar a los cuerpos tratados con dichas sustancias, perdiendo su significado original.
Sin duda, las momias más famosas son las de Egipto, pero este método ha sido utilizado en muchas más culturas, cada una de ellas aportando su propio significado y procedimientos.
1. Cultura oriental. En China, Tíbet y Japón, el método consistía en sumergir el cuerpo en agua. A continuación, toda la sangre del cuerpo era retirada y sustituida por alcohol. Por último, era proporcionado un baño con arsénico, un elemento especialmente tóxico.
La palabra ‘momia’ es originaria de Persia y deriva de la palabra ‘mummeia’ o ‘mum’, que significa asfalto o piche, sustancia empleada para tratar los cuerpos. Con el transcurso del tiempo la palabra momia pasó a designar a los cuerpos tratados con dichas sustancias, perdiendo su significado original.
Sin duda, las momias más famosas son las de Egipto, pero este método ha sido utilizado en muchas más culturas, cada una de ellas aportando su propio significado y procedimientos.
1. Cultura oriental. En China, Tíbet y Japón, el método consistía en sumergir el cuerpo en agua. A continuación, toda la sangre del cuerpo era retirada y sustituida por alcohol. Por último, era proporcionado un baño con arsénico, un elemento especialmente tóxico.
2. Cultura católica. La cultura católica no es muy partidaria de este tipo de conservación, sin embargo se han encontrado restos en Italia y en México con una peculiaridad en común: La presencia de cal. La cal puede formar una especie de película sobre el cuerpo, aislándolo de la tierra, se sabe que las catacumbas son gélidas y secas, lo que contribuye mucho para la momificación, por eso se han encontrado restos momificados en las catacumbas de muchos templos cristianos.
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| Monjes momificados en un monasterio de la Rep. Checa |
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| Momias de Chinchorro |
4. Cultura egipcia. En el Antiguo
Egipto, creían en la vida después de la muerte. La momificación en estos territorios era
muy costosa, y sólo estaba al alcance de la
familia real y de las familias ricas. El proceso duraba en total unos 70 días.
El cuerpo se llevaba hasta las orillas del río Nilo, ya que
éstos necesitaban de abundante agua para llevar a cabo el proceso. Comenzaban colocando
el cuerpo del difunto sobre una mesa con forma de león y procedían a lavar el
cuerpo, luego extraían
los órganos, empezando por el cerebro, que era extraído con unos ganchos
por la nariz, y siguiendo con el estómago, los intestinos, los pulmones y el
hígado.
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| Desenterrando la momia de Tutanhkamon |
El corazón era el único órgano que se dejaba en el
interior del cuerpo. Según la creencia egipcia, era el lugar que
albergaba los sentimientos, la conciencia y lo más
importante, la vida. Después de haber extraído los
órganos, se procedía a cubrir
el cuerpo con natrón, una sal que desecaba el cuerpo, deshidratándolo
para evitar su descomposición.
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| Momia de Ramses II |
Pasados unos días,
se retiraba la sal y se rellenaba el
cuerpo con serrín o limo procedentes del Nilo. Acto seguido se cosía
y si la persona era importante se le podía cerrar con lino, una placa de cera
y si se trataba del mismísimo faraón se le
podía llegar a colocar una chapa de oro. El cuerpo se lavaba
con agua procedente del Nilo. Después, era bañado
en aceites y bálsamos aromatizados. Finalmente vendaban el cuerpo con vendas de lino
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| Sarcófago de un faraón egipcio |
AUTOMOMIFICACIÓN. AHORA DEJO DE RESPIRAR Y .... ME MOMIFICO
Ahora viene cuando nos quedamos con la boca abierta.... Se han registrado casos de monjes que en su afán por alcanzar el nivel de Buda, han empezado a prescindir de todo tipo de alimentación y se provocaban la muerte lentamente, de forma que al morir sus cadáveres se conservaban momificados. ¿y cómo?
Ahora viene cuando nos quedamos con la boca abierta.... Se han registrado casos de monjes que en su afán por alcanzar el nivel de Buda, han empezado a prescindir de todo tipo de alimentación y se provocaban la muerte lentamente, de forma que al morir sus cadáveres se conservaban momificados. ¿y cómo?
Los monjes utilizaban un raro método japonés denominado sokushinbutsu. Comenzaban comiendo sólo frutas durante unos mil días. Durante los siguientes mil días, el monje sólo tomaban un té venenoso hecho de la corteza del árbol de urushi. Su savia
contiene un producto químico abrasivo venenoso y es tan tóxico que
incluso su vapor puede causar una erupción, y permanece en el cuerpo
después de la muerte. El veneno provocaba el vómito, con la consiguiente pérdida de fluidos corporales. Al haber eliminando el exceso de grasas y agua, que de otro modo atraería bacterias e insectos después de la muerte, al final de los 2000 días el cuerpo del monje había desaparecido por hambre y deshidratación
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| sokushinbutsu |
Por último, el monje entraba en una tumba estrecha especialmente construida para situarse en posición de loto y comenzar la meditación mientras sus acólitos lo encerraban, dejando un pequeño tubo para permitir que entrara aire. Los últimos días de los monjes los pasaban meditando y tocando una pequeña campana una al día para señalar a los que estaban fuera que todavía estaba vivo. El día que la campana dejaba de sonar, se retiraba la caña de respiración y se sellaba la cripta.
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| El cuerpo de un monje que ha conseguido la automomificación |
Aunque fueron miles los que lo intentaron, sólo se tienen registrados un par de decenas de monjes que han conseguido este extraño tipo de momificación.
MOMIFICACIÓN EN UN ENTORNO NATURAL.
El proceso de momificación puede darse también en la naturaleza, concretamente en condiciones extremas de frío, salinidad, acidez o aridez: con una buena combinación de estos ingredientes se puede conseguir una momificación natural.
Por ejemplo en las turberas y pantanos del norte de Europa se han hallado cuerpos momificados de la Edad de Hierro. Estos lugares contienen un musgo (Sphagnum, o musgo de turbera) que crea cambios químicos que frenan la actividad microbiana, ayudando a la preservación de los tejidos. El agua es muy ácida, y reinan las bajas temperaturas y la ausencia de oxígeno. En este caso, la piel se conserva, aunque oscurecida, y los huesos desaparecen, porque el ácido los disuelve.
En climas extremadamente frios, el proceso de momificación se puede dar fácilmente ya que la temperatura es muy baja y el frío inhibe la actividad de las bacterias. Uno de los ejemplos más conocidos es del cuerpo momificado de Otzi, el hombre de hielo que vivió hace 5.300 años en los Alpes suizos, considerado como el caso forense más viejo de la historia
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| Expertos forenses con el cuerpo momificado de Otzi |
