No pensé yo que anoche cuando me tumbé a ver otra genialidad del pedazo de director que es Guy Ritchie pudiera sacar yo una entrada para el blog, y con mi sorpresa, así fué. En una secuencia de la película Rockanrolla, el mafioso Lenny, explica detalladamente (también un poco a su manera) uno de las relaciones ecológicas más problemáticas: La aparición de una especie invasora y el consiguiente desplazamiento del nicho ecológico de la especie autóctona, en este caso brillantemente ejemplificado por la relación entre el cangrejo rojo americano (Procambarus clarkii) y el cangrejo de rio europeo (Austropotamobius pallipes).
http://www.youtube.com/watch?v=fPjNf9fRDBc
Un artista este Lenny, utilizando los cangrejos rojos como tortura para hacer cantar a sus victimas.
En principio, resumir brevemente varios conceptos importantes:
Una especie invasora es aquella que es introducida en un ecosistema diferente del de origen intencionadamente o no, y que se convierte en una plaga en el ecosistema de destino debido a la descendencia fértil y su capacidad de colonización.
Debido a la globalización y la facilidad con la que se puede comerciar y transportar animales, plantas etc... se están dando situaciones que en la naturaleza sería muy dificil, por no decir imposible ver. La llegada de especies extrañas a un nicho concreto, que debido a su facilidad de colonización, se asientan perfectamente y compiten de manera más agresiva y eficiente por los recursos, origina el desplazamiento de las especies autoctonas e incluso muchas veces comprometiendo su propia superpervivencia como especie. Este tipo de relación ecológica se denomina Principio de exclusión competitiva o Ley de Gause.
La Ley de Gause viene a resumirse en que especies en competencia biológica por los mismos recursos no puede coexistir en forma estable si los demás factores ecológicos permanecen constantes. Uno de los competidores siempre dominará al otro, llevándolo a la extinción o a una modificación evolutiva o de comportamiento hacia otro nicho ecológico.
Los daños pueden ser tanto ecológicos como económicos: Suponen una pérdida progresiva de la biodiversidad, aparición de nuevas enfermedades, ocupación natural del hábitat de especies endémicas, pérdida de recursos etc...
En la península tristemente tenemos varios ejemplos de este proceso: El alga asesina (Caulerpa taxifolia) que está poniendo en peligro las praderas de posidonias del fondo oceánico, El mejillón cebra (Dreissena polymorpha) en el Delta del Ebro, la tortuga de florida (Trachemys scripta elegans) esa tortuga chiquitita que se le compra a los niños en la feria y que acaba siendo liberada por el desagüe o en una charca vecina cuando el niño se cansa de cuidarla, el visón americano (Mustela vison), el lucio (esox lucius) introducido para la pesca deportiva y la que nos centra en este blog, la del cangrejo rojo americano.
Historia de la introducción del cangrejo rojo americano en la Península.
En los años 70 el cangrejo de río europeo es un recurso muy demandado para la alimentación en España. Sin embargo el descenso en la calidad de los ecosistemas fluviales se manifiesta en un descenso progresivo de las poblaciones de esta especie. En 1973 se realiza la primera prueba con la la primera introducción de 100 kg de cangrejos procedentes de Nueva Orleans en los arrozales de una finca de Badajoz. Poco después, y con apoyo institucional por parte del ICONA, se repitió la introducción, esta vez a mayor escala, en las marismas del Guadalquivir.
El exito en su aclimatación fue inmediato, con lo que otras zonas de la Península como el Delta del Ebro o los arozales de Valencia repiten la experiencia. La elevada tasa de dispersión del cangrejo americano facilita que en poco tiempo se encuentren poblaciones etsables en portugal, en toda la cuenca del Guadiana y finalmente por toda la Península.
Problemática derivada de esta introducción
Pero estas introducciones supusieron un coste muy alto e inesperado, no como explica Lenny, "y como buenos americanos se comieron a los europeos" (que también tiene miga la afirmación)... El cangrejo rojo era portador de la peste del cangrejo o afanomicosis, una enfermedad causada por el hongo Aphanomyces astaci que tiene un efecto devastador sobre las poblaciones de cangrejo de río europeo (Austropotamobius pallipes). El cangrejo autóctono, muy afectado ya por la pérdida de calidad de las aguas de los ríos, fue diezmado por la afanomicosis que portaba consigo el cangrejo americano.
Sumado a esto los daños ecológicos que producen por su exagerada actividad ramoneadora, comprometiendo los recursos de otras especies acuáticas, su actividad excavadora que afecta a diques, muros y barreras y que se ha comprobado que pueden ser vectores de otra grave enfermedad, la Tularemia, hacen a esta especie una de las invasoras más problemáticas.
Si muchos son los daños, algún beneficio si aporta. Su comercialización supone muchos puestos de trabajo en el delta del Guadalquivir y han pasado a formar parte de la dieta cigüeñas blancas y negras o de la nutria.
La introducción de especies fuera de su hábitat de origen puede dar lugar a desequilibrios ambientales, problemas económicos e incluso de salud. De hecho, las especies invasoras suponen hoy día una clara amenaza a la diversidad global.
Y como finaliza la película:
<<Andate con ojo porque voy a ser igual que tú tío, ahora voy a ser un auténtico rocknrolla.>>
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